25 nov 2013

American Music Awards 2013. Actuaciones para no olvidar

En todos los sentidos. Porque igual que caemos rendidos a los pies de algunos de los artistas que pisaron el escenario de los AMAs, salimos huyendo ante la puesta en escena de otros. La mejor actuación de la noche, sin duda, el homenaje de Jennifer López a Celia Cruz. Con espectáculos así, no me extraña que en norteamérica se enamoren de lo latino. El público en pie para aplaudir a esta diosa del contoneo, esta diva del cante, que ofreció una performance de 10.



Justin Timberlake, que no dudó en vitorear a J.Lo con entusiasmo, fue uno de los triunfadores de la noche. Acumuló tres galardones: Artista Masculino Favorito Pop/ Rock, el mismo premio en la categoría Soul/ R&B y Álbum Favorito en esta última. Su actuación estuvo curiosamente desprovista de los característicos movimientos del cantante, por lo que fue eclipsada por otras más espectaculares.

Como la de Lady Gaga con R.Kelly. Una historia sobre el escándalo de faldas protagonizado por un presidente y su secretaria… Y lo demás lo dejamos al entendimiento de cada uno. Lo que está claro es que la puesta en escena fue original a la vez que cuidada, pero subrayó la incapacidad de Gaga a la hora de moverse y no parecer bastorra como ella sola. Algo que reduce considerablemente su capacidad para construir de manera creíble el papel de una secretaria que pierde totalmente la voluntad ante Mister President.


A pesar de esa masculinidad de la que no puede huir la reina del esperpento, vocalmente estuvo maravillosa. Algo que se supone hemos de dar por hecho, pero que a veces se pierde o sufre de manera importante cuando se busca una espectacularidad en el escenario.

Es el caso de Katy Perry, una señora que ya me transmite pereza mortal. Se ponga lo que se ponga canta igual de mal en todos los premios. En la mitad de los momentos no se le escucha nada y en la otra mitad preferirías no hacerlo. En este caso la artista, que se está convirtiendo en una de las más perdidas en lo que a vestuario se refiere, (y si nos ponemos musicalmente también) apareció vestida de geisha y en calcetines blancos… Que si, las auténticas lo llevan pero acompañados de sus sandalias de 10 cm. Supongo que Katy pasó de lucirlas ante la posibilidad de acabar de morros en el suelo… No tengo ni que expresar el horror que esto me parece, por lo que aprovecho para comentar que ‘uncondicionally’ es una palabra que no debería aparecer en una canción NEVER y menos en el estribillo.


Hablando de actuaciones aburridas, ahí está la de Imagine Dragons, que deben ser absolutamente conscientes de que su tema es increíble, porque no se molestan en buscar varias formas de exponerlo y se limitan a pasearse por distintos shows haciendo exactamente lo mismo. Por mucho que musicalmente sean maravillosos, hay que ser poco inteligente para pensar que hoy en día con eso basta.


Algo parecido les pasa a Macklemore y Ryan Lewis. Están magníficos interpretando este ‘Can’t Hold Us’ pero pasan de la teatralidad y se repiten. Esta manera de funcionar la trasladan también a los discursos de agradecimiento que continúan siendo alabados por lo reivindicativo de los mismos. Eso si, la canción me vuelve loca.


Con esto no quiero decir que un escenario sencillo no pueda conquistar. Simplemente se nota la diferencia entre una puesta en escena en la que se ha puesto esfuerzo y una de la que se ha pasado ampliamente.

El ejemplo perfecto de sencillez y efectividad se lo Great Big World y Christina Aguilera con su piano y su dueto, tan potente como para no necesitar nada más.


Los chicos de One Direction y sus bombillas lograron algo parecido eligiendo una cosa fácil, sin mucha complicación, que continúa el estilo del videoclip de la canción que interpretaron y complementa a los jóvenes cantantes.

En la misma línea encontramos a Rihanna, su premio al icono y la Artista Femenina Favorita, la emoción que compartió con su madre, y su ‘Diamons’. Un tema pulido a la perfección con fuerza en sí mismo. Aún así cuando la veo de negro tan quitecita y tapadita en el escenario, no hago otra cosa que la mítica e insuperable actuación que protagonizó en estos mismos premios hace ya tres años.


Taylor Swift no actuó pero terminó la noche como absoluta triunfadora con  cuatro premios: Mejor Artista Femenina Pop/ Rock, Mejor Artista Femenina y Mejor Álbum Country, y Artista del Año.


Triunfando también pero en otro plano, el de los cuadros absolutos tenemos a Miley Cyrus, su vagina y su gatito. Por favor que alguien le diga a esta ordinaria que ese pelo tiene aspecto de sucio, que subirse tanto la parte de abajo del modelito afea sus atributos femeninos y que al final con tanta controversia nos vamos a olvidar por completo de su magnífico álbum.


Otra que tiene problemas con la zona del baile es Kesha, que en su actuación con Pitbull apareció con algo parecido a un pañal que hacía que cualquier movimiento de la parte inferior de su cuerpo quedase… raro.


Y para cerrar el capítulo ‘Outfits que no se deberían llevar’ nos quedamos con la prueba definitiva: el momento en que Ariana Grande subió al escenario para agradecer su premio al Nuevo Artista del Año, para acabar protagonizando la imitación de las imitaciones de Chiquito de la Calzada.

De verdad que es una pena que esta chica que roba el aliento de manera sobresaliente cuando esta quietecita actuando, sea tan paleta. Si acabas de salir del cascaron y no has aprendido a andar con un modelito de corte sirena, póntelo para tu insuperable momento de gloria en el escenario, y luce uno corto para todo lo demás. Del ‘me saco el papelito de la pechera’ no comments.

Prefiero quedarme con su excelente 'Tattooed Heart', una canción interpretada con una madurez que no muestra en otros aspectos y que pone la piel de la gallina a la vez que impresiona a la mismísima Gaga.





No hay comentarios:

Publicar un comentario