8 dic 2010

Princesa encuentra príncipe y lo tiene que abandonar… vaya p**a mie**a de final.


El otro día organizamos una amiga y yo uno de esos días para nosotras. De mañanita cruzamos el retiro para ir a ver la exposición de Mario Testino al Thyssen, yo por la foto y ella por la moda. Después de comer la idea era ver una peli, plantadas en el sofá con muchas chuches de por medio...

“¡¡¡Vamos a elegir!!!”

La verdad es que de la “cantidad” uno no podía quejarse, se ofrecían en taquilla un buen número de películas, pero rápido encontramos una dificultad. Casi todas, (vamos que se salvaban tres)… dramas. Drama, drama, drama. Pues vaya chasco.

No me malinterpretéis hay grandes películas que son dramas, pero también hay muy buenas comedias, esto es lo que mucha gente parece olvidar. A veces pienso que puede ser porque los finales felices cuesta más creérselos, o las situaciones benévolas, pero oigan, ¡un poquito de optimismo por favor!

Ahora ese género de la risa goza de una credibilidad ínfima… algo que en parte también atribuyo a la falta de talento a la hora de titular… Si señores, y sino que se lo digan a “The hangover”, que en nuestro país triunfó únicamente gracias al boca a boca porque el titulo que se le dio más bien ahuyentaba al personal... “Resacón en las vegas”.

El arte de titular… es como si a “Some like it hot”, más conocida por aquí como “Con faldas y a lo loco”, la hubiesen llamado “Travestidos tras la rubia” o algo parecido…

De todas formas ya no se “escriben” películas de esa manera. Eso si que eran comedias. Los personajes "hablaban" y todo, si, si. Esto lo digo por si me lee algún jovenzuelo acostumbrado a las historias de hoy, en las cuales los personajes en muchos casos no son capaces de construir frases de más de cinco palabras…


En especial para todos estos recomiendo “La fiera de mi niña”. La señorita a la que interpreta tan brillantemente Katharine Hepburn habla tanto que dan ganas de matarla, en el buen sentido claro.

Yo no digo que no se escriban grandes películas ahora, es solo… que en la comedia no me parecen los diálogos tan brillantes ni graciosos, será que soy de humor chapado a la antigua.

En cualquier caso, que estoy notando yo que me desvió del tema… Necesitamos más amor y más comedias y sobretodo MÁS FINALES FELICES.

Si, si, si, y esto lo escribo con conocimiento de causa. A las pruebas me remito pegando un salto a la tele. "Glee". Esta serie musical tiene un éxito que no te lo crees, ¿por qué? Porque la gente ya esta suficientemente triste y llena de preocupaciones y problemas últimamente… y para los chicos del coro marchoso las cosas “a veces” salen requetebién.

¡Yo tampoco pido siempre! Solo a veces… como debería ser en la vida real. Una de cal y otra de arena. Momentos brillantes que te llenan de alegría que luego vas racionando para aguantar todo lo que crees insoportable.

Para los interesados que se hayan quedado pensando a que películas me refiero…

“Arsénico por compasión”
“Ariane”
“Uno, Dos, Tres”
“Vacaciones en Roma”
“Sucedió una noche”

etc, etc, etc… Ah! Una de mis favoritas sin duda:

"Historias de Filadelfia"





Berta F. Del Castillo

4 comentarios:

  1. SI a los dramas!!
    NO a los dramas sobre enfermedades, que para eso ya está la p... realidad!!
    SI a las comedias!!
    SI a la nueva generación audiovisual!!!

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  2. Pues claro que SI a los dramas, pero si valoramos por igual a las comedias; y por supuesto bienvenidos seamos los nuevos audiovisuales!!!

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  3. No sé si te acordarás.. yo no recuerdo muy bien el momento.. pero me prestaste.. Arsénico por compasión, y me reí mucho.... Gran recomendación (No esperaba menos de ti, ¡claro!)
    Has visto An education??

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  4. Me encantó “An education”, deliciosa, fue una de las nominadas a los Oscars el año pasado y me las veo toditas!!!

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